El mediocampista que reemplazaría a Busquets, viene de ser campeón y llegaría a Barcelona
Tras la coronación en la Bundesliga, Kimmich pareciera que se despidió de su gente
La definición de la Bundesliga fue para el infarto, y no se supo el resultado hasta el final de los encuentros, recordemos que Musiala, lo ganó en los últimos minutos y con el empate del Dortmund, el Bayern se coronó campeón.
Una de las piezas claves del equipo bávaro desde hace años, el mediocampista y defensor, Joshua Kimmich, que es una fija, también en la Selección de Alemania.
Pareciera que su estadía en el Múnich llegó a su fin, aunque no se sabe donde continuará su carrera, ya que todavía le quedan 2 años de contrato y no es un jugador económico.
Dentro de los interesados de hacerse con los servicios del volante de 28 años, están, Liverpool, Arsenal y el Barcelona, aunque también existe la posibilidad de que decida quedarse otra temporada en el equipo que lo vio nacer.
¿Barcelona es una opción?
Se ha hablado mucho de la salida de Sergio Busquets del Barcelona y de las palabras de Xavi, explicando que para pelear la Champions League, necesitan encontrar a su reemplazo. Como es de esperar, Kimmich es una opción mas que probable, desde lo futbolístico para ocupar el lugar que va a dejar el volante español al final de la temporada. Pero ya hay que empezar a analizar los costos, más que nada por la situación difícil que atraviesa el azulgrana con respecto al fair play financiero. Es muy complicado que se de este traspaso, ya que no es como la situación de los otros refuerzos que pretende el Barcelona, ya que a Kimmich le quedan 2 años mas de contrato, por lo que el equipo culé debería abonar por su ficha, que estaría tasada alrededor de los 60 millones de euros, cifra que hoy pareciera muy lejana de lo que puede darse el lujo de gastar el Barcelona. Habrá que ver como termina esta historia, por lo pronto en la celebración, Kimmich se fue al fonde de la cancha y se quedo solo, observando a su gente festejar la coronación por casi dos minutos, gesto similar al que hizo Lewandowski cuando abandó el Bayern Múnich.