En el primer partido del Mundial, dos jugadores mexicanos no se aguantaron y se agarraron a golpes

Los duelos de egos, en este caso terminaron en golpes. Era el primer partido de mundial, el Tri pintaba para grandes cosas, para avanzar a una meta que significaba llegar al quinto partido, pero en el camino, dentro del vestidor se encontró este problema de gigante magnitud.

Es que en el seleccionado nacional los problemas siempre se presentaron y esta vez, dos jugadores se agarraron a golpes en el partido de debut del mundial, donde México hizo historia y marcó el mejor registro que ha tenido en su registro futbolero, al llegar a cuartos de final.

De acuerdo a Boser Salceo, el ego entre Tomás Boy y Hugo Sánchez en 1986, superaba cualquier orden, de entrenador, de directivos, de quien usted quiera poner al frente. Así fue como en el partido de estreno del seleccionado nacional, se desató una bronca que habría provocado Tomás Boy.

El Jefe le habría dicho a Hugo Sánchez que él no tenía el poder para mandar en una platilla que ya llevaba años entrenando con Tomás como delantero. 

Así fue como el jefe hizo calentar a Hugo, quien tampoco reaccionó bien y se desentonó el tema. Esta relación hasta ahora no se sana y cada que se ven, se ofenden.