A Martino le da miedo hacerlo: Jaime Lozano y la lección para sacar el potencial del jugador mexicano y llevarnos a la medalla

Sin tanta prensa, sin tantos adornos, pero con el tema claro de cómo trabajar con el jugador mexicano en un aspecto que le cuesta y mucho sacarse de la cabeza. El inflarse por un partido bueno es el mal del deportista nacional, pero Jaime Lozano dejó claro en la interna de México, que esto es un seleccionado y no una vitrina.

El tema, por ejemplo, de Diego Lainez, en el juego ante el cuadro de Sudáfrica. Esto llamó la atención pero fue un factor clave en el proceso de Jaime Lozano. El 10 empezó a tomar aires de grandeza y había que sacudir el vestidor, por lo que tomó la decisión de mandarlo a la banca.

A Gerardo Martino le hubiera temblado esta situación, porque Lainez es uno de los consentidos de la televisora y no hubiera tomado esa postura. Pero Lozano, conociendo el día a día del futbolista nacional, tomó esta determinación que le sirvió al grupo para saber que había que ganarse el puesto en los entrenamientos y los nombres no pesaban.

Por ello, el mérito también al entrenador, quien se la jugó con un proceso que se consolidó y da frutos con esta medalla de bronce, con un trabajo en silencio, pero también entendiendo que el jugador mexicano también necesita este sacudón.