Juan Carlos Mosqueda fue una de las promesas más importantes que Luis Fernando Tena descubrió cuando estuvo en las Águilas del América. El futbolista mostraba grandes condiciones e incluso cierto sector de la prensa se atrevió a señalar que podría ser el nuevo Cuauhtémoc Blanco.
Pero la presión en el América hizo que el jugador no demuestre su talento, por lo que al final se fue a otros clubes como Necaxa y Santos Laguna, con los que consiguió el ascenso a la Liga MX, aunque al final de cuentas perdió el protagonismo que tenía como el nuevo volante 10 de México.
Ahora a sus 35 años, el heredero del Divo de Tepito puede tener otra oportunidad para jugar al fútbol, pero en la Liga de Balompié Mexicano. El Club Tiburones está dispuesto a ficharlo. Dicha institución ya fue vinculada al naciente torneo y busca futbolistas para incrementar su nómina.
Así la vida le cambió al juvenil que tenía todo para ser el nuevo ídolo de las Águilas, pero ahora el fútbol lo lleva a jugar en el puerto jarocho, con el nuevo club de Veracruz.
