Las vueltas que da el fútbol son regularmente trágicas pues no son pocos los casos de jugadores que pasaron de tocar la gloria con sus equipos ganando campeonatos o clásicos y ya en el retiro no supieron administrar las grandes fortunas que ganaron y terminaron en trabajos de una persona común y corriente o con negocios fracasados.
Para el caso de Tigres, los últimos 10 años han sido de grandes glorias para el club ganando varios títulos y dándole a sus futbolistas los mejores salarios de todo el país, situación por la que, si bien son conocidos los nombres de mucho éxito y lujos como André-Pierre Gignac, otros tantos han pasado desapercibidos y es mucho más discreta su actividad fuera de lo deportivo.
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Uno de los jugadores que fue clave en la obtención de títulos sin muchos reflectores fue José Rivas, quien además se ganó a la afición marcando goles importantes en clásicos regios a pesar de ser defensor y ha sido recordado por la entrega que solía poner a cada partido, ganándose el apodo del “hincha que juega” en relación al cariño que le tenía a la institución.
Además se le recuerda de manera importante pues defendió con orgullo al equipo universitario en la final del Apertura 2016 ante el América pues cuando hubo una trifulca que llegó a los golpes en las bancas de ambos equipos, fue uno de los que le puso el pecho a las balas, se vio muy involucrado en la pelea y aunque salió expulsado, la afición lo recuerda con orgullo.
Ahora organiza rifas
Aunque una vez retirado se ha dedicado a ser entrenador de fuerzas básicas, la ‘Palmera’ reconoció para el podcast “Obra del Deporte” que no tiene el mismo salario que como futbolista y en redes sociales se le ha visto promocionando una marca de organización de rifas para sacar algo más de dinero.
