Jared Borgetti es uno de los jugadores que destacó en el mundial del 2002 pero reveló un tema polémico que sintió en la interna del camerino del conjunto de la selección nacional de México, en uno de los partidos más trascendentales del cuadro tricolor en el Mundial de Corea y Japón.
En diálogo para ESPN, Borgetti rompió el silencio y manifestó que sintió cosas extrañas en el camerino del seleccionado nacional de México, en la interna, antes de jugar con el cuadro de los Estados Unidos aquel partido de octavos de final, en el que el Tri perdió la serie, digamos más accesible para llegar al quinto partido.
Borgetti reveló que el camerino cambió, que no hubo grito de motivación, que Javier Aguirre no consideró poner algo anímico en el conjunto tricolor por lo que para él, hubo exceso de confianza. Incluso en redes sociales se maneja la teoría que el partido fue vendido por el DT y por algunos jugadores, sustentado en el cambio de Ramón Morales, algo que no cuadró en la afición mexicana.
Borgetti no dudó en señalar a los capitanes, allí dijo que faltó liderazgo y que nunca se tomó una decisión en firme en ese momento, algo que le sorprendió ya que en el resto de partidos se vio fraternidad y motivación.
