(VIDEO) El futbolista mexicano se preocupa más por estar bien peinado que por el fútbol

En México siempre se habla de la falta de prospectos que nos saquen adelante en el fútbol, cuando los mismos jugadores ponen por encima sus vanidades y banalidades que su rendimientos en la cancha

En México siempre se habla de la falta de prospectos que nos saquen adelante en el fútbol, cuando los mismos jugadores ponen por encima sus vanidades y banalidades que su rendimientos en la cancha
En México siempre se habla de la falta de prospectos que nos saquen adelante en el fútbol, cuando los mismos jugadores ponen por encima sus vanidades y banalidades que su rendimientos en la cancha
PB
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Nos quejamos por falta de talento, pero lamentablemente el futbolista se preocupa más por estar bien peinado y tener un auto último modelo. Voy a recordar algo que uno de los grandes goleadores en la historia de Chivas, padre de un gran amigo mío, compañero en Televisa, Pablo González; el “Pablotas” González me dijo alguna vez: “En mis tiempos los vestidores olían a sudor, olían a hombres, hoy huelen a salón de belleza”; eso me lo dijo hace unos 20 años.

Desde luego que no podemos generalizar en ese tema, pero lamentablemente sí se da que muchos futbolistas, no solo en México sino en muchos lugares del mundo, pero hablando de nuestros país, ante la ausencia de talentos, una camada de “vacas flacas”, después de un época donde tuvimos a jugadores como Ricardo Pelaez, Beto García Aspe, el ‘Emperador’ Claudio Súarez, el ‘Capi’ Ramírez Perales, Hugo Sánchez, Germán Villa, Raúl Rodrigo Lara, el ‘Sheriff” Quirarte, etc, etc, etc, grandes jugadores, ya no surgen más.

Hoy en día estamos ante una camada de “vaca flacas”, y tal vez algo de esto influya en la falta de entrega del jugador, la falta de profesionalismo total; ser profesional no es solo ir a entrenar todos los días dos o dos horas media, pues ya la vida del futbolista es muy cómoda, cuando la mayor parte de la gente trabaja o trabajamos seis, siete u ocho horas diarias, el jugador de fútbol trabaja dos o tres horas al día y juega los fines de semana, siendo un ser privilegiado sin duda alguna.

Muchos de los futbolistas son venidos de estratos socioeconómicos bajos o de la clase media y al volverse profesionales tienen un cambio total en su vida; de repente llega lo que no esperaba, muchachas guapas, automóviles último modelo, mucho dinero, mucha fama, todo esto por esa gran vitrina que es el fútbol, esa bendición que tienen de tener un talento para dedicarse a algo tan extraordinario como el deporte más importante del planeta tierra, el que más seguidores tiene que el fútbol.

El alcohol y la fama son los peores enemigos del futbolista

Sin embargo, el futbolista no aprovecha la bendición de su trabajo y ya cuando llega la fama se preocupa mucho por este bien peinadito, un problema que yo no tendría sin duda alguna, se preocupan mucho por oler muy bonito, por tener un automóvil que apantalle a sus compañeros, a las mujeres, a los vecinos, último modelo, de las mejores marcas y se olvidan de que todo ese viene gracias a su actuación dentro del terreno de juego, en la cancha, donde debe estar lo importante.

Por otro lado, en muchas ocasiones se tiran mucho a la bebida, al “chupe”, a la fiesta, al baile, al reventón, lo cual todavía los aleja mucho más de la posibilidad de ser grandes atletas y en este caso grandes futbolistas. Así que sin duda el futbolista debería pensar más en su actuación dentro de la cancha, en sudar el terreno de juego, en empapar la camiseta, que en el aspecto físico o en el carro que maneja, ya que todo eso vendrá incuestionablemente sin son grandes futbolistas y grandes profesionales.

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