Por Javier Vaca
La eliminación de Chivas de Guadalajara del Torneo Clausura 2025 tras el empate ante el Atlas en el Estadio Jalisco dejó una profunda huella de desazón en varios integrantes del plantel rojiblanco. La frustración por no alcanzar siquiera la zona de repesca fue evidente en los rostros de los jugadores al finalizar el encuentro, y en algunos casos, la tristeza se manifestó hasta las lágrimas, reflejando la magnitud del fracaso para una institución con la historia y la exigencia del Rebaño Sagrado.
En medio de este ambiente de desolación, se confirmó la partida de uno de los jóvenes talentos de Chivas: Mateo Chávez. A pesar de que su deseo no era despedirse del club en estas circunstancias, el lateral izquierdo disputó su último encuentro con la camiseta rojiblanca, ya que tiene un acuerdo cerrado para continuar su carrera en el fútbol de los Países Bajos con el AZ Alkmaar. Su salida se da en un momento agridulce, marcado por la tristeza de la eliminación pero también por la ilusión de emprender una nueva aventura en el balompié europeo.
Para Mateo Chávez, esta transferencia representa una oportunidad invaluable para mostrar su calidad y seguir desarrollando su potencial en un fútbol de mayor exigencia. Su llegada al AZ Alkmaar le abrirá las puertas para crecer profesionalmente y, en el futuro, consolidarse como un jugador importante que pueda ser considerado para la selección mexicana. Este paso al fútbol europeo contrasta con la profunda decepción que embarga a Chivas, sumido en la desgracia de un nuevo torneo sin Liguilla y sin siquiera la opción de pelear por un lugar en la repesca.
A pesar de la tristeza por su partida en este contexto adverso, la transferencia de Mateo Chávez podría dejar un rédito económico importante para las arcas de Chivas. Se especula que el AZ Alkmaar pagaría alrededor de cinco millones de dólares por el 50% de la carta del joven defensor. Esta inyección económica sería significativa para el club, especialmente considerando la necesidad de reestructurar el plantel de cara al próximo torneo. Además, Chivas conservaría un porcentaje de su carta, lo que le permitiría obtener ganancias adicionales en caso de una futura venta del jugador a otro club.
La salida de Mateo Chávez, aunque dolorosa por tratarse de un joven con proyección, representa una de las pocas noticias positivas en medio del fracaso del Clausura 2025 para Chivas. Su partida al fútbol europeo no solo beneficia al jugador en su desarrollo profesional, sino que también podría generar ingresos importantes para el club en el presente y en el futuro. Mientras tanto, el Rebaño Sagrado deberá enfocarse en analizar las causas de este nuevo tropiezo y planificar cuidadosamente el próximo torneo para intentar revertir la situación y devolver la alegría a su afición.
En este escenario de lágrimas y despedidas, Chivas deberá afrontar una reestructuración profunda. La partida de Mateo Chávez, aunque anunciada previamente, se concreta en un momento de gran frustración para el club y su afición. Ahora, la directiva tendrá la tarea de buscar los refuerzos adecuados y encontrar un nuevo proyecto deportivo que pueda devolver al equipo a los primeros planos del fútbol mexicano, aprendiendo de los errores cometidos en este doloroso Clausura 2025.
08/05/2025
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