Por Javier Vaca
El partido entre River Plate y Rayados de Monterrey en el Mundial de Clubes terminó igualado sin goles en el marcador. Fue uno de los encuentros más tácticos que se han visto en el torneo, con ambos equipos priorizando el orden defensivo. Sin embargo, el director técnico del cuadro argentino, Marcelo Gallardo, mostró su frustración tras no poder doblegar la sólida defensa albiazul, que estuvo comandada por el experimentado zaguero Sergio Ramos. El resultado generó un ambiente de descontento en el banquillo de River Plate.
En la conferencia de prensa posterior al partido, Marcelo Gallardo aseguró que el encuentro había que jugarlo y, si bien merecieron tener algunas opciones de peligro, su equipo no pudo concretar las oportunidades generadas, teniendo que conformarse con el empate. El "Muñeco" reconoció que se va con una "bronca" significativa por el resultado, evidenciando su insatisfacción por no haber obtenido la victoria que buscaban ante el conjunto mexicano, lo que complica su panorama en el certamen.
“Tengo bronca de no haber ganado, pero después vengo acá y tengo que decirles el análisis del partido. Ahora a preparar con tranquilidad el próximo”, señaló en conferencia de prensa Marcelo Gallardo en un claro tono de insatisfacción por el resultado. La imposibilidad de romper la zaga de Rayados generó una preocupación evidente en el estratega argentino, pues ahora River Plate tendrá que buscar su clasificación a los octavos de final en el último compromiso de la fase de grupos ante el Inter de Milán, lo que exige una victoria o un empate con goles para seguir con vida.
Rayados de Monterrey, por su parte, también cuenta con muchas posibilidades de clasificarse a la siguiente ronda del Mundial de Clubes. Ganando por dos goles de diferencia ante el Urawa Red Diamonds, el cuadro regiomontano podría meterse directamente a los octavos de final, sin importar el resultado del partido entre Inter de Milán y River Plate. Esta situación otorga a los dirigidos por Fernando Ortiz una posición favorable en el grupo, dependiendo de sí mismos para avanzar en la competencia internacional.
Incluso si golea al Urawa Red Diamonds y los otros dos clubes del grupo empatan, el cuadro regiomontano podría colocarse como primero de su sector, lo que le daría una ventaja en el emparejamiento de la siguiente fase. Una de las ventajas para el cuadro de Rayados es que enfrentará a un equipo ya eliminado y sin presión, lo que podría llevar al entrenador rival a rotar jugadores o a un planteamiento menos exigente. Esta situación podría ser aprovechada por Rayados para buscar una victoria contundente y asegurar su pase.
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