Torrent y el 1er pedido, si no lo cumplen, ni se esfuercen en llamarlo en Chivas

La renuncia de Domenec Torrent al Atlético de San Luis ha desatado una ola de especulaciones que lo sitúan cada vez más cerca del banquillo de las Chivas de Guadalajara. Su condición de agente libre lo convierte en un candidato atractivo para Amaury Vergara, quien busca un nuevo estratega que enderece el rumbo del Rebaño Sagrado. Sin embargo, la llegada del exmano derecha de Josep Guardiola a Verde Valle no sería un camino sencillo, ya que Torrent ha dejado claras sus condiciones para tomar las riendas del equipo, exigencias que pondrían a prueba la tradicional gestión del club rojiblanco.

Según la información del periodista Fernando Esquivel, Domenec Torrent no está dispuesto a embarcarse en un proyecto efímero. Su principal condición para aceptar la dirección técnica de Chivas sería la garantía de un proyecto estable, con un respaldo sólido por parte de la directiva. Torrent exigiría un contrato de al menos un año, evitando así situaciones como la reciente contratación de Gerardo Espinoza por solo seis meses, lo que denota su búsqueda de un compromiso a largo plazo donde pueda implementar su visión futbolística con tiempo y paciencia. Esta exigencia subraya la intención del técnico español de construir una base sólida y no ser una solución temporal.

Otra condición innegociable para Domenec Torrent sería tener voz y voto en la contratación de nuevos jugadores. El técnico español exigiría ser consultado y dar su visto bueno a la llegada de cualquier refuerzo, evitando así imposiciones por parte de la directiva. Esta exigencia no es caprichosa, ya que Torrent busca conformar un plantel que se ajuste a su idea de juego y donde cada incorporación sea estratégica y funcional. Este control sobre los fichajes es un tema recurrente en el fútbol y ha sido motivo de conflicto en diversos clubes, como lo experimentó Efraín Juárez en su salida del Atlético Nacional de Colombia. La experiencia de Torrent con Guardiola, donde la planificación del plantel era un trabajo conjunto, marca su postura en este aspecto.

Una de las peticiones más ambiciosas de Domenec Torrent para tomar las riendas de Chivas sería tener control sobre las Fuerzas Básicas del equipo. El técnico español identifica la cantera como uno de los puntos débiles del club en los últimos años, contrastando con el exitoso desarrollo de talento joven en equipos como Pachuca, Santos Laguna e incluso el América. La exigencia de Torrent va más allá de observar a los jóvenes talentos; busca tener injerencia en la metodología de formación, la promoción de jugadores al primer equipo y la implementación de una filosofía de juego unificada desde las categorías inferiores hasta el máximo circuito. Esta visión integral del proyecto deportivo es una apuesta por construir un futuro sólido y sostenible para Chivas.

Las exigencias de Domenec Torrent inevitablemente evocan el caso de Robert Dante Siboldi, quien también sonó como posible entrenador de Chivas el año pasado. Según diversas fuentes, el ex técnico de Tigres habría solicitado refuerzos de calidad para tomar el mando del equipo, una petición a la que Amaury Vergara no accedió. Esta negativa llevó a Siboldi a declinar la oferta y a que la directiva rojiblanca se decantara por el español Óscar Junyent. La historia se repite, y la pregunta que surge es si Amaury Vergara estará dispuesto a ceder ante las condiciones de Torrent, otorgándole el control del proyecto deportivo que el técnico español considera indispensable para su éxito. La decisión del dueño de Chivas será crucial para determinar si el anhelado matrimonio entre Torrent y el Rebaño Sagrado finalmente se concreta o si el club deberá buscar otro pastor para su banquillo. La afición rojiblanca espera con expectación el desenlace de esta negociación, consciente de que la llegada de un técnico con el pedigrí de Torrent podría marcar un antes y un después en el futuro del equipo.