Ya no es Máquina, el nuevo apodo que se ganó Cruz Azul tras el baile que le dio Vancouver

Cruz Azul en el primer tiempo, liquidó la final de la Concacaf Champions Cup al anotar cuatro goles ante el asombro de propios y extraños. El equipo cementero demostró una contundencia y un dominio avasallador desde los primeros minutos, dejando sin capacidad de reacción al Vancouver Whitecaps. Esta exhibición ofensiva generó una serie de comparaciones inesperadas y un nuevo apodo para el cuadro dirigido por Iván Alonso, marcando una pauta importante en su desempeño continental.

Durante la transmisión del partido a través de ESPN Argentina, los panelistas que seguían el encuentro compararon al conjunto de Cruz Azul con el París Saint-Germain, equipo que recientemente ganó la UEFA Champions League dándole un "baile" al Inter de Milán. La analogía buscaba resaltar la superioridad mostrada por Cruz Azul en la final, equiparándola con la de un gigante europeo en su camino hacia un título continental de gran envergadura. Este comentario puso de manifiesto la sorpresa y el reconocimiento de los analistas argentinos.

"Cruz Azul quiere acabar pronto la final como lo hizo el PSG", comentaban durante la transmisión del partido, según los reportes de la cadena deportiva argentina. Así como el PSG goleó al conjunto italiano en su camino a la gloria europea, el conjunto cementero también decidió presionar a tope al Vancouver, buscando sentenciar el encuentro desde la primera mitad. Esta estrategia agresiva y efectiva le valió al equipo mexicano este peculiar y elocuente sobrenombre, que rápidamente empezó a circular entre la afición.

"Cruz Azul es el PSG de la Concacaf", aseguraba otro de los comentaristas, quienes veían cómo el cuadro cementero aplastaba en 45 minutos al Vancouver. La contundencia y la determinación con la que Cruz Azul abordó la final de la Concacaf Champions Cup sorprendieron a los analistas, que no dudaron en destacar la jerarquía y el buen momento futbolístico del equipo. Este nuevo apodo refleja la admiración generada por su rendimiento, proyectando una imagen de superioridad en la región.

"Así como en Múnich, ya se acabó la final, Cruz Azul liquidó al Vancouver", añadieron durante la transmisión de ESPN Argentina. La comparación con la final de la Champions League, donde el PSG demostró su poderío, subraya la autoridad con la que Cruz Azul se hizo con el título de Concacaf. El "baile" que le dio a Vancouver dejó claro que la Máquina está de vuelta, y ahora, con su nuevo apodo, buscará consolidarse como el gigante de la región, con miras a futuros desafíos internacionales.