Jugó en México, metió mujeres a la concentración, ahora recoge fresas

La única constante de la Selección Mexicana a lo largo de su historia es la de las indisciplinas de los jugadores, pues ya sean promesas o consagrados, todos tienen al menos un acto que los definió dentro y fuera del Tri y marcó su camino para siempre, pero es posible que en las últimas décadas no hubiera uno que se viera tanto como un villano.

Aunque no tuvo la posibilidad de brillaren selecciones juveniles, su debuten uno de los equipos más populares de México le ayudó a tener una buena vitrina tanto a nivel nacional como internacional, tanto así que aterrizó en la Premier League en lo que parecía ser el inicio de un futuro que lucía prometedor hasta que llegó su punto de quiebre.

Fue después de la Copa Oro de 2019 cuando un grupo de jugadores decidió aprovechar unas horas libres en Nueva York y tuvieron una fiesta con mujeres y alcohol en un local privado, situación por la que se echó toda la culpa y responsabilidad a Javier Hernández, cuando sólo fue uno de los que participó y los demás quedaron impunes, como confesó hace unos meses en entrevista para Fox Sports.

El máximo goleador del Tricolor intenta sacarle el lado bueno a su lesión y que fue dado de bajo por lo que resta de la temporada del LA Galaxy para compartir tiempo con sus hijos y su exesposa, como compartió en Instagram.