Malagón ya no lo aguanta, Jardine se dio cuenta, sería baja para semifinales

La noche del 10 de mayo quedará grabada en la memoria de la afición americanista como una dulce revancha. Las Águilas del América, con autoridad y contundencia, lograron sellar su pase a las semifinales del Clausura 2025, superando a un Pachuca que históricamente se había erigido como uno de sus rivales más complejos, tanto en la fase regular como en las siempre tensas instancias de eliminación directa. El Estadio Ciudad de los Deportes vibró con la energía de un equipo que demostró su jerarquía y su firmeza en la búsqueda del bicampeonato.

Tras un empate sin goles en el encuentro de ida, disputado en la siempre complicada cancha del Estadio Hidalgo, el América llegaba a su feudo con la ventaja que otorgaba su mejor posición en la tabla general. La premisa era clara: no perder para avanzar a la siguiente ronda. Sin embargo, este América, con la mira puesta en el bicampeonato, no se conformó con especular. Desde el silbatazo inicial, los dirigidos por André Jardine mostraron una clara vocación ofensiva, decididos a imponer su juego y a sentenciar la eliminatoria por la vía del triunfo.

La ambición del América encontró su recompensa en la figura de Alejandro Zendejas. El talentoso extremo azulcrema se erigió como el héroe de la noche, desatando la euforia en el Coloso de la Ciudad de los Deportes con un doblete tempranero que encarriló la eliminatoria a favor de los locales. Sus dos goles, marcados con inteligencia y precisión, no solo pusieron el 2-0 definitivo en el marcador, sino que también minaron la moral de un Pachuca que vio cómo sus esperanzas de avanzar se desvanecían en los primeros minutos del encuentro. La actuación de Zendejas fue un claro ejemplo del poderío ofensivo del América y de la capacidad de sus individualidades para marcar la diferencia en momentos cruciales.

Con el boleto a las semifinales asegurado, las Águilas del América ahora aguardan a su próximo rival, que saldrá del enfrentamiento entre Cruz Azul y León. La posibilidad de un Clásico Joven en la antesala de la final genera una enorme expectación entre la afición, consciente de la intensidad y la rivalidad histórica que envuelve estos duelos. Sin embargo, el América deberá mantenerse enfocado en el presente y esperar el desenlace de la otra llave para conocer a su siguiente obstáculo en el camino hacia el bicampeonato.

A pesar de la alegría por el pase a semifinales, no todo fue armonía en el seno del América. Durante el encuentro ante Pachuca, las cámaras captaron varios momentos de tensión entre el guardameta Luis Ángel Malagón y el lateral izquierdo colombiano Christian Borja. El arquero azulcrema no dudó en reprender enérgicamente a su compañero en varias ocasiones, evidenciando errores defensivos que pudieron haber comprometido el resultado.

Esta situación interna podría tener consecuencias en la alineación del América para las semifinales. André Jardine, siempre atento al rendimiento y la concentración de sus jugadores, podría considerar mandar a Christian Borja al banquillo de suplentes y darle la oportunidad a Luis Fuentes, conocido como el "Chicote" Calderón, quien ha sido una opción recurrente desde la banca durante gran parte del Clausura 2025. La decisión del técnico brasileño en cuanto al lateral izquierdo será un punto clave a seguir en la antesala de las semifinales, donde la solidez defensiva será fundamental para seguir avanzando en el torneo. La disyuntiva entre la juventud y proyección de Borja y la experiencia y solvencia de Calderón plantea un interesante debate para el cuerpo técnico americanista. La afición, por su parte, ya comienza a expresar sus preferencias en las redes sociales, dividida entre el potencial del colombiano y la seguridad que ofrece el experimentado lateral mexicano.