No es por Azcárraga, la inexplicable razón por la que Jardine insiste en poner a Lichnovsky de titular en el América

La noche de la ida de los cuartos de final del Apertura 2025 en el Gigante de Acero dejó un sabor amargo para el Club América. Más allá del resultado adverso contra Rayados de Monterrey, la polémica se centró en una decisión táctica que pocos entendieron: la titularidad de Igor Lichnovsky. El central chileno, con una fase regular marcada por la discontinuidad, apareció de manera sorpresiva en el once inicial de André Jardine, una elección que, al final, le salió el tiro por la culata al estratega brasileño y que obligará a las Águilas a una épica remontada en casa. Pero existe una justificación por parte del entrenador brasileño que varios medios cercanos al club han revelado.

La inclusión de Lichnovsky fue un golpe de timón que desató la controversia desde que se anunció la alineación. Durante semanas, la prensa y la afición habían especulado sobre la influencia externa detrás del jugador, llegando incluso a vincular su presencia con una supuesta cercanía a Emilio Azcárraga, dueño del equipo, tal como lo ha señalado David Faitelson en diversas ocasiones. Pero según reportan fuentes cercanas al cuerpo técnico, Jardine valoraría la experiencia del chileno antes que la gallardía de Ramón Juárez, a quien ya le encontró un defecto.

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Está claro que la decisión de Jardine se basó en una lectura muy particular de la plantilla: la inexperiencia de Ramón Juárez en escenarios de alta presión, como una Liguilla, llevó al estratega brasileño a inclinarse por el 'currículum' de Lichnovsky, esperando que la veteranía aportara solidez en un ambiente hostil. Una decisión de "experiencia sobre momento actual" que le explotó en la cara al estratega y que podría traerle mayores problemas con la directiva azulcrema.

Al parecer, si la intención de Jardine era buscar seguridad, el resultado fue diametralmente opuesto. El desempeño del chileno fue cuestionable, culminando en errores puntuales que le costaron muy caro al América. La jugada más crítica fue la del segundo gol de Rayados, donde Lichnovsky mostró una falta de concentración y capacidad de reacción crucial, permitiendo que la ofensiva local concretara el tanto que aumentó la desventaja para los azulcremas.

Los errores defensivos no solo minaron la moral del equipo, sino que confirmaron la sensación de que el jugador no estaba en el ritmo competitivo que requiere una Liguilla. La apuesta por la experiencia, sin el respaldo de la continuidad en el campo, se tradujo en una fragilidad defensiva que Rayados supo explotar a la perfección. Según reportan medios cercanos al Nido de Coapa, la directiva ya habría cuestionado esta decisión táctica del brasileño.

Con la derrota, el panorama para el América se complica, considerablemente. Las Águilas deberán ahora buscar una hazaña en el partido de vuelta, que se disputará en el Estadio Ciudad de los Deportes. Para avanzar a las semifinales del Apertura 2025, el equipo de Jardine está obligado a ganar por una diferencia de, al menos, dos goles, algo que se antoja muy complicado tras lo mostrado en Monterrey.

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La responsabilidad de revertir la situación recae no solo en la ofensiva, sino en la capacidad de Jardine para corregir los errores cometidos en el BBVA, siendo el más evidente la elección de su zaga central. La afición espera que el partido de vuelta se juegue sin 'favores' o 'apuestas arriesgadas', y que el once titular sea el que ofrezca las mayores garantías para el objetivo: la clasificación. Está claro que la polémica Lichnovsky-Juárez está lejos de terminar y podría definir el futuro del estratega brasileño en el banquillo americanista.

Por Javier Vaca – Opinión | El Futbolero MX