No fue por la cláusula de Europa, el rival de Azcárraga que impediría que Sanabria llegue al América

Cuando todo parecía encaminado para que Juan Manuel Sanabria se convirtiera en nuevo refuerzo del Club América, una inesperada intervención de alto nivel podría frenar su llegada al conjunto de Coapa. Aunque las Águilas ya habrían alcanzado un principio de acuerdo con el Atlético de San Luis, y como parte de la operación incluso cedieron a Franco Rossano y Cristian Calderón al conjunto del Necaxa, el fichaje podría venirse abajo por razones ajenas a lo deportivo. La afición azulcrema se mantiene a la expectativa sobre esta situación.

Según información del periodista David Medrano, el motivo del estancamiento no sería únicamente la cláusula de salida hacia Europa, tasada en aproximadamente 10 millones de dólares, sino la falta de entendimiento directo entre el jugador y la directiva azulcrema. Sin embargo, una versión más reciente agrega un nuevo giro al drama que envuelve esta posible transferencia. La complejidad de la negociación ha ido en aumento, generando incertidumbre en el entorno del América.

El comunicador Rubén Rodríguez reveló que el verdadero obstáculo está fuera del campo. De acuerdo con su información, el denominado “G-8” de la Liga MX, encabezado por Jesús Martínez, estaría presionando para evitar la venta de Juan Manuel Sanabria al América. Esta situación, si bien no explícita, genera una clara confrontación de poderes, lo que significaría un revés directo al poder de Emilio Azcárraga, dueño de las Águilas y cabeza visible del Grupo Televisa, en el mercado de transferencias.

Este bloque de clubes, conformado por Chivas, León, Pachuca, Monterrey, Tigres, Juárez, Toluca y el propio Atlético de San Luis, ha tenido históricamente diferencias con el Grupo Televisa en temas de poder y control dentro de la Liga MX. El caso Juan Manuel Sanabria podría ser una muestra más de la división interna entre los altos mandos del fútbol mexicano. Esta disputa de intereses podría afectar directamente la conformación del plantel azulcrema.

Mientras tanto, en Coapa la expectativa por reforzar el lateral izquierdo crece, ya que el equipo ha liberado espacio en esa zona y busca cerrar a un jugador con experiencia internacional como el uruguayo. Sin embargo, con la presión del “G-8”, el panorama se complica, y el América podría verse obligado a buscar alternativas en el mercado para cubrir esa posición. La afición del América espera que la directiva logre sortear este obstáculo y consiga los refuerzos necesarios para el próximo torneo.