Por Diego Francisco
El mexicano Hirving Lozano gana un salario de 4.5 millones de euros y aunque podría comprar coches deportivos de lujo, el mexicano destina sus ingresos a otro tipo de inversiones, sea en la parte cultural o en la parte de su formación académica.
El Chucky en su estancia en el Napoli prefirió no tener un coche de lujo, algo que en Italia es accesible al tener a dos fábricas de las más importantes del mundo de coches deportivos. Pero Giovani dos Santos en Barcelona sí se dio un lujo, cuando pertenecía a esa institución.
Las críticas hacia el jugador brasileño mexicano ahora abundan ya que nunca se consolidó y quedó en una promesa. Decían que sería el nuevo Ronaldinho y bajo esa condición en Barcelona, el jugador pidió un coche Audi A 7 valorado en 2 millones de pesos.
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Estas historias marcan la diferencia de mentalidad entre un jugador que considera más su preparación en otros aspectos lejos del deportivo y otro jugador que en su momento, se dedicó a gozar la vida de un futbolista promedio, con fiestas, coches de lujo y otros excesos, que marcaron la carrera del ex 10 de la selección de México.
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26/04/2024
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