Si ni Milito confío en él, cómo lo quieren en el Mundial, el jugador de Chivas al que le dio la espalda

El duelo entre Chivas y Cruz Azul podría haber tenido mucho más que una clasificación a las semifinales del Torneo Apertura 2024. Todo esto por las aspiraciones de varios jugadores que están en la órbita de Javier Aguirre como posibles candidatos para disputar el Mundial 2026 con la Selección Mexicana. Sin embargo, según reportan varios analistas cercanos al Rebaño Sagrado, uno de los elementos por los cuales la afición rojiblanca apostaba mucho para que vistiera la playera mexicana podría haber perdido definitivamente su oportunidad tras no dar la talla ante el conjunto cementero y ser exhibido por el propio Gabriel Milito quien lo sacó del terreno de juego.

El partido de ida, vital en la aspiración rojiblanca, expuso la peor versión de 'La Hormiga'. González mostró un nivel tan discreto, plagado de imprecisiones y una nula capacidad para generar peligro, que obligó a una decisión drástica por parte de su estratega. Gabriel Milito no dudó en sacrificarlo tras un primer tiempo sencillamente calamitoso. Esta situación despierta serias dudas sobre el nivel de juego de Armando González para la Liguilla de la Liga MX y, según fuentes cercanas al cuerpo técnico nacional, podría haberlo alejado definitivamente de los planes del Vasco Aguirre.

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La crítica a González cobra mayor relevancia si se considera su reciente historial. El delantero venía de culminar la fase regular como campeón de goleo, un hito que ilusionó a la afición y disparó las especulaciones sobre su futuro, proyectándolo como la nueva figura del ataque rojiblanco y candidato natural para la Selección Mexicana. Sin embargo, según varios periodistas deportivos en Guadalajara, su desempeño en el duelo decisivo contra La Máquina Cementera podría ser determinante para que Armando González quede fuera de la lista definitiva para el Mundial 2026.

El juego de 'La Hormiga' se ha caracterizado por una preocupante intermitencia que preocupa en las esferas del futbol nacional. Si bien tiene destellos de gran calidad y olfato goleador, en los momentos de máxima presión su fútbol se diluye. Ante Cruz Azul, las carencias fueron notorias: se observó una nula generación de peligro, una evidente falta de conexión con el mediocampo y sus compañeros de ataque, y una presencia inofensiva en el área, justo el sector donde debería ser determinante. Milito, al sacarlo del campo, evidenció que las estadísticas de la fase regular no tienen peso si el rendimiento decae en la Fiesta Grande, donde la exigencia requiere un compromiso constante que el atacante no pudo demostrar.

La sustitución temprana de Armando González fue la señal más clara de que el cuerpo técnico ha perdido la fe en el jugador en situaciones límite, dejando en evidencia su incapacidad para responder a la presión. La alta exigencia de Gabriel Milito y su reconocida poca tolerancia a la pasividad resultaron cruciales para tomar la decisión de sacrificarlo tras el primer tiempo. Para un entrenador que busca la máxima competitividad, un jugador que se muestra inofensivo en el área rival y desconectado del sistema no tiene cabida en un partido de Cuartos de Final.

Esta falta de respaldo por parte de Milito, quien lo conoce día a día en los entrenamientos, podría ser el factor más contundente en contra de González para sus aspiraciones con el Tri. Si el técnico que debe guiarlo no le da respaldo en el momento de mayor presión de la temporada, resulta difícil argumentar a su favor ante Javier Aguirre. "Armando siente que no tiene el respaldo total, pero debe entender que en estos niveles la exigencia es máxima", aseguró una fuente cercana al cuerpo técnico rojiblanco para TV Azteca Deportes. La acción de Milito no solo buscaba corregir el rumbo táctico del equipo, sino que sirvió como un llamado de atención severo sobre la necesidad de madurez y constancia en el máximo nivel.

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El bajo nivel de Armando González no es un problema exclusivo de Chivas; según reportan varios medios especializados, impacta directamente en las recientes conversaciones sobre su posible llamado a la Selección Mexicana, que busca desesperadamente renovar su ataque de cara al Mundial 2026. En las semanas previas a la Liguilla, el nombre de 'La Hormiga' comenzó a sonar con insistencia entre los analistas y la afición como una opción fresca para el ataque tricolor, incluso siendo considerado por algunos expertos en la órbita de la dirección técnica nacional.

No obstante, lo exhibido ante Cruz Azul podría funcionar como un balde de agua fría a cualquier aspiración internacional. El alto nivel de exigencia que implica el Tri requiere constancia, madurez y la capacidad de aparecer en momentos cumbres, atributos que González demostró no poseer en el partido de Cuartos de Final. Con actuaciones tan deslucidas en partidos de eliminación directa, según fuentes cercanas a la Federación Mexicana de Futbol, parece inviable que el delantero pueda ganarse la confianza de un cuerpo técnico nacional que necesita soluciones inmediatas y fiables para el proceso mundialista.

Armando González se encuentra ante una encrucijada que podría definir su futuro a nivel internacional. Si quiere dejar de ser catalogado como un jugador intermitente y cumplir las expectativas generadas con su título de goleo, deberá revertir esta situación inmediatamente en el partido de vuelta contra La Máquina. De lo contrario, su etiqueta de promesa podría quedarse estancada, y el sueño de vestir la camiseta de la Selección Mexicana se congelará indefinidamente, perdiendo la oportunidad de sumarse a los talentos jóvenes que el país necesita para el Mundial 2026.

Por Javier Vaca – Opinión | El Futbolero MX